Un seguro de hogar permite proteger el patrimonio ante cualquier contingencia. 

Cuando compras una vivienda lo más habitual, aunque no es obligatorio, es que también contrates un seguro del hogar por posibles averías, robos, incendios o incluso daños a terceros. Las coberturas básicas que podemos encontrar en el mercado son aquellas que cubren el continente, es decir lo que alude a la construcción de la vivienda y el valor que ésta tiene. El contenido, aquello que está dentro del inmueble, y por el último, la responsabilidad civil que abarca los daños a otras personas.

Dependiendo de lo que interese proteger se elegirá uno u otro aunque lo más normal es elegir aquellos llamados seguros multi-riesgo. Éstos cubren casi cualquier daño.

Ante todo y la ventaja más evidente es la de proteger nuestro hogar. La inversión que se hace en un bien inmueble es muy grande y por lo tanto se debe de proteger. Sobre todo en lo que tiene que ver con los daños a terceros.

Debemos cerciorarnos de asegurar todas nuestras pertenencias, desde ropa pasando por muebles hasta objetos de gran valor. Al asegurar el contenido se protegen todas las cosas que puedan ser dañadas por incendios, robos o daños por fugas e inundaciones.

• Gastos adicionales ante siniestros repentinos y graves que se pueden afrontar gracias a la contratación de un seguro.
• En ocasiones suceden altercados fuera de la vivienda que, evidentemente no afectan a la vivienda, pero si a nuestros bienes, por ejemplo si sufrimos un robo. Muchos de los seguros ayudan frente a este tipo de complicaciones.
• También puedes tener la tranquilidad de tener una asistencia personalizada sobre pequeñas reparaciones que se pueden necesitar en momento puntuales. Así puedes tener los servicios de un especialista sin estar preocupados de a quién contratar. La facilidad es una gran característica de los seguros del hogar.

Fuente: https://www.bbva.com/es/importancia-contar-seguro-hogar/